Host: Nuestra Más Compasiva Maestra Suprema Ching Hai aceptó con cariño una invitación sincera de Satchitananda (Seth Blaustein), el productor ejecutivo del Congreso por la Paz Mundial, el Sr. Adil Kassam, fundador de UNIFY y del equipo del Congreso por la Paz Mundial, para ser una oradora de honor en la apertura del Congreso por la Paz Mundial, para conmemorar el Día Internacional de la Paz, que se celebra en todo el mundo el 21 septiembre 2022. Teniendo lugar el 21 y el 22 de septiembre, el evento fue una conferencia virtual que buscaba unir a líderes espirituales y religiosos de varias confesiones, para compartir mensajes de paz, armonía y no violencia.
Entre otros oradores estaban: el Honorable Jefe Phil Lane Jr., el Honorable Rabino David Rosen, Yogmata Keiko Aikawa, Dr. Sadhvi Bhagawati Saraswati, Neale Donald Walsch y muchos otros.
A continuación, el mensaje que la Maestra tuvo la amabilidad de grabar y que se transmitió a todos los que se unieron al evento online.
Estimadísimo Reverendo Satchitananda, Sr. Adil Kassam, y equipo del Congreso de la Paz Mundial:
Gracias por el honor de ser invitada a su importante día de oración y meditación por la Paz Mundial. Debido a algunas limitaciones de tiempo, no podía ofrecer mucho más. Estos son algunos de mis pensamientos sobre la paz mundial o la paz interior para la humanidad: La cuestión es que no podemos tener paz si no damos paz.
El Buda fue iluminado, por eso pudo dar la iluminación a otros que creen en Él. Así, como tenemos dinero en el banco, podemos ayudar a otros en algunos casos cuando lo necesitan. Como, algo de nuestra disponibilidad financiera. Hablar de dinero no nos ayuda si no tenemos nada: y menos a quienes queremos ayudar. La paz interior viene solo cuando practicamos la paz, no solo por la meditación, no solo al hablar sobre paz, no solo al pensar sobre la paz, o desear tener paz para nosotros mismos o para el mundo.
El Buda dijo que debemos tener compasión por todos los seres: en la práctica, no solo en la palabra. El Buda dijo que si no seguimos la dieta vegana, entonces aunque practiquemos la meditación o cualquier medio de yoga, alcanzaremos algún nivel demoníaco o alguna posición divina Celestial únicamente – nunca podríamos alcanzar la Budeidad. Y Él incluso dijo que quien come carne no es Su discípulo.
Entonces, soy seguidora del Buda. No me atrevería a enseñarle a cualquiera ningún tipo de meditación solo para tener paz interior. La paz interior comienza cuando damos paz a los demás. No podemos tener paz si otros están en dolor, y principalmente, o indirectamente, causado por nosotros, por nuestras acciones o nuestro estilo de vida. No podemos tener paz interior si, por nuestro estilo de vida, como lo es consumir carne de personas-animales muertas, que han sido torturadas, que han estado encarceladas, que se les ha privado de todo tipo de libertad, dignidad y paz su vida entera en campos de concentración animal.
No solo en el budismo – en todas las grandes religiones del mundo. Todas las enseñanzas con respecto a la violencia hacia los otros y hacia las personas-animales están escritas muy claramente.
Por ejemplo, en la Biblia se dice que Dios hizo todas las frutas y verduras para nosotros los humanos como comidas. Y Dios también hizo otras cosas: hierbas y vegetales nutritivos para las personas-animales. Y Dios ha dicho: no mates más ovejas o terneros para hacerle ofrendas a Él porque tus manos estarán llenas de sangre. Y cuando ores, Dios apartará Su cabeza. Él no escuchará. Dios dijo que tienes que detenerlo, de otro modo Dios ya no escuchará. Eso es lo que estamos haciendo ahora. No escuchamos a Dios y seguimos rogando a Dios para que nos escuche lo que queremos, y no nos importa lo que Dios quiere. Entonces, ¿cómo podemos tener la paz que tanto atesoramos si no escuchamos las palabras de Dios sobre qué hacer para tener la bendición de Dios, para tener paz?
Puedo hablar eternamente de este tema, pero solo cité algunas de las enseñanzas de dos de las más grandes religiones del planeta para recordarles. Y eso es todo. Que mis palabras tengan algún impacto en su intelecto y conciencia. Que su estilo de vida cambie, que pase a estar en el camino del Cielo, el camino de Dios, para que puedan regresar al Cielo, regresar a Dios. Amén.
Entonces, el primer paso para la paz interior es ser vegano: abstenerse absolutamente de todo tipo de alimentos que causan sufrimiento, para que las personas-animales, nuestros cohabitantes, nuestros hermanos y hermanas, y como dijo el Buda, nuestros parientes de vidas anteriores o incluso de esta vida no tengan que sufrir. Luego de morir, pudieron haberse convertido en personas animales, quizás para estar con nosotros, nos acompañan, o quizás para pagar algún pequeño karma que cometieron.
No obstante, cualquier razón que los hizo convertirse en personas animales, aún son nuestros parientes o amigos, por eso no podemos dejarlos que sean masacrados e incluso en masa, miles de millones por semana o millones por hora, incluso, impotentes, agonizantes y completamente solos: solitarios, indefensos en cualquier parte del mundo.
No podemos tener paz causando todo esto directa o indirectamente. Especialmente, hoy en día, tenemos la oportunidad de investigar en internet o en los medios para averiguar cómo nuestros amigos y parientes en la forma de personas animales pacíficas y gentiles han sido torturados, han sido encarcelados, han sido abusados, han sido tratados cruelmente antes de que su pedazo de carne muerta llegue a nuestras bocas. Ni hablar sobre la paz interior o la paz mundial. Este tipo de trato es totalmente injustificado, horrible. Podría compararse con el infierno.
¿Cómo podemos aprender algo, para tener paz interior, si nosotros, nuestros corazones, nuestras mentes, nuestro subconsciente y consciente, saben que nuestro estilo de vida causa sufrimiento incalculable a numerosas personas-animales que son tan inocentes, tan gentiles y tan impotentes, indefensas? Como ser humano con capacidad plena, lleno de inteligencia y lleno de evidencia provista sobre el sufrimiento y la angustia de nuestros amigos animales, nuestras personas-animales, ¿cómo puede ese conocimiento consciente o inconscientemente, llevarnos a la paz o darnos paz, o garantía de paz en nuestra vida?
Yo, yo misma, personalmente no puedo llorar más. Cada vez que veo todo este dolor, incluso solo en la pantalla, mi corazón siente como que estoy en el infierno. Es por eso que pedimos a los miembros de nuestra Asociación que oren cada día por un Mundo Vegano. Porque si no tenemos un Mundo Vegano - el Mundo en Paz está lejos, lejos, lejos, lejos, como todos ustedes saben muy bien.
Incluso, por ejemplo, solo la guerra en Ucrania, el mundo entero apoya la paz en Ucrania. El mundo entero pide a Rusia que salga de Ucrania: se vaya a casa y deje a la gente de Ucrania en paz. Todo tipo de apoyo, y la guerra aún se prolonga. Es imposible siquiera explicar este evento. Es imposible siquiera entender a cualquier tipo de humano que comenzó este tipo de guerra y hace que la gente sufra tanto: muriendo y huyendo como refugiados en tierras extrañas, sin tener nada que ver con ellos. Muchos niños muriendo. Mujeres siendo abusadas, violadas- incluso niños, chicos, chicas. Y miles de personas mueren, o decenas de miles en ambos lados, por nada, por ninguna razón en absoluto, excepto solo para mostrar poder, o solo lo hacen por quizás aburrimiento o quizás están drogados o locos.
Es porque no practicamos lo que queremos. Si queremos que nuestro cuerpo se sienta limpio, debemos ocuparnos de ello. Debemos lavarnos hasta que esté limpio de la forma que lo queremos. Si queremos cortar nuestra hambre, tenemos que encontrar comida para comer. Si queremos saciar nuestra sed, debemos beber agua o algún líquido, algún jugo de fruta o jugo de vegetal - por ejemplo.
Pero la piel de las personas animales, la carne de las personas animales - incluso los huevos y leche, pescado - todo esto es el sufrimiento causado a un sin fin, un sin número de seres sintientes que están vivos. Solo porque no se ven como nosotros, eso no significa que no tengan sentimientos, que no tengan inteligencia, que no tengan conciencia. Todos sabemos eso ya. Si creemos en Buda, entonces debemos saber que Buda predicó eso. Ellos son seres sintientes. Sintientes – significa que sienten, pueden tener sentimientos, tienen emociones. Tienen inteligencia, como nosotros. Quizás de diferentes maneras.
Podemos ver todo en internet o en los filmes que hace la gente, cuán inteligentes son las personas animales y cuánto sufrimiento pueden sentir, exactamente como nosotros. ¿Cómo podemos terminar una vida que aún está respirando, que aún siente, que tiene amor, que puede mostrar afecto - no solo a su propia especie, sino a otras especies, y a nosotros humanos también? ¿Cómo podemos siquiera tener paz si no damos la paz a los otros? Ni siquiera tenemos que dar paz, solo dejarlos en paz, entonces tenemos paz. Porque Dios les dio… Discúlpenme. Es solo la emoción que me hace… no sentirme muy bien.
Lo siento. Espero que este discurso que me han solicitado hacer, que siento el honor de contribuir, les llegue a tiempo. Por mi situación especial, no siempre puedo hacer cosas que todos quieren que haga en su propio tiempo. No es conveniente para mí explicar mi situación, especialmente ahora mismo. Y solo espero que mi maravilloso equipo, prescindiendo de sus horas de sueño, puedan recibir esto y ordenarlo, porque no tengo un guión frente a mí. Estoy hablado por teléfono, así que espero que al otro lado, después, ellos puedan ordenarlo, donde tal vez repito algunas palabras y hacerlo lindo y presentable, y enviárselo a ustedes a tiempo. Si no, entonces que así sea. Lo siento.
Siento mucho si he ofendido a alguno de ustedes en la audiencia, pero no lamento decirles la verdad, porque eso es el amor - decirles a sus amados la verdad. Incluso si te cuesta tu vida, incluso si cuesta tu reputación, tu amistad o la admiración de la gente – lo que sea. Siempre tienen que decir la verdad, porque somos los que buscamos la verdad. Somos buscadores de la verdad. Y hemos encontrado algo de la verdad que estamos buscando tener.
Y tenemos que decir la verdad. Ojalá hubiera enseñado al mundo entero a meditar, a encontrar la paz interior. Pero eso, lo tienen que aportar ellos mismos. Primero que todo, lo más importante, el primer paso es dejar en paz a las personas-animales, como Dios ha querido que sean - la forma que Dios los ha hecho. Dios los hizo pacíficos y les proporcionó cosas para que puedan sostener sus vidas en la Tierra, igual que Dios ha creado alimento nutritivo para sustentar nuestras vidas.
Pero Dios nunca en ninguna religión ha dicho que comamos otras criaturas, porque todos somos hijos de Dios. Las personas-animales son también hijos de Dios. Entonces, en toda nuestra humilde sabiduría deberíamos respetar a los hijos de Dios, la creación de Dios, y nunca, jamás deberíamos destruirlos a sangre fría solo para meterlas en nuestras bocas, llenar nuestros estómagos con sangre y agonizante letalidad, y la mayor crueldad y atrocidad inhumana.
Entonces, para tener paz interior, debemos primero respetar la paz de los demás seres. Debemos ser veganos. Entonces la paz llegará a nosotros tranquila, segura, permanentemente, y esto también llevará a la paz mundial – la paz por siempre.
No puedo decírselo de otra manera. Solo les digo la verdad, nada más que la verdad. Depende de ustedes decidir lo que quieren hacer con su preciada vida en la Tierra - encontrar a Dios, ser uno con Dios, respetar la creación de Dios, o ir en la dirección opuesta, y saben a dónde van a terminar.
Que todos los Cielos los bendigan, y que Dios los proteja y los ilumine. Que se protejan ustedes mismos escogiendo la pacífica, compasiva y natural dieta vegana. Amén. Gracias por su atención. Deseándoles todo lo mejor para que encuentren su propia vida pacífica pronto, que sean iluminados pronto, encuentren pronto a un buen Maestro, si así lo desean, y que sepan que están haciendo la paz siendo veganos. Dios los ama. Dios nos ama a todos.
Host: Nuestra más profunda gratitud, Amadísima Maestra Suprema Ching Hai, por compartir este mensaje de paz revelador de la verdad, iluminando así el sendero de la humanidad hacia un futuro de respeto y benevolencia por todos los seres. Muchas gracias, Satchitananda (Seth Blaustein), Sr. Adil Kassam, y a todos los involucrados, por su bondadosa dedicación para promover la armonía planetaria. Que todos los ciudadanos del mundo despierten pronto y adopten el compasivo estilo de vida vegano para alcanzar la verdadera y duradera paz en la Tierra, en la serenidad celestial.
Para más información y para ver el evento completo, visiten: CongressofPeace.com
